So that all perverts and hardened sinners understand:
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God did not make you like that, God made only Adam and Eve, the rest of us are the product of Adam and Eve's reproduction and we are born with the mortal sin we carry from our first parents. All men receive an immortal soul from God in the moment of conception. God is our Fathet Creator. We are creatures because Adam and Eve are creations of God. God made them male and female and in a state of “super grace” to put it simply.
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Adam and Eve misused their freedom, they listened to the envious serpent and disobeyed God, and therefore God punished them: He expelled them from the earthly Paradise, and made painful things enter in our lives: pain, death, the possibility of eternal damnation, the submission of the woman to the man...
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You were not created by God with the perversion that you have, but that is the product of the disorder that sin brought with it. God does not want you this way but wants you to be saints and gives you all the calls in your conscience, in the events, in His Word if you want to read and understand, all the help in the Sacraments if you truly try to live in obedience to the laws of God and be saved.
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If you decide to make war on God, thinking that you are going to beat Him you are fools because God is infinitely wise and powerful, all His enemies go to hell.
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The Church, with love and wisdom and good works and examples, tries to make sinners know, love and serve God in order to be Saints or at least not to have mortal sins and be able to reach Purgatory and after this purification reach Heaven, where Our Lady of the Roses tells us that to enter, one must be clean like a star.
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Para que todos los pervertidos y pecadores empedernidos entiendan:
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Dios no los hizo así a ustedes, Dios hizo sólo a Adán y Eva, los demás somos producto de la reproducción de Adán y Eva y nacemos con el pecado mortal que arrastramos de nuestros primeros padres. Todos los hombres reciben un alma inmortal de parte de Dios en el momento de la concepción. Dios es nuestro Padre Creador. Somos creaturas porque Adán y Eva son creaciones de Dios. Dios los hizo varón y mujer y en un estado de “súper gracia” por decirlo en palabras sencillas.
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Adán y Eva usaron mal de su libertad, hicieron caso a la serpiente envidiosa y desobedecieron a Dios, y por lo tanto Dios los castigó: los echó del Paraíso terrenal, e hizo entrar cosas dolorosas en la creación: el dolor, la muerte, la posibilidad de condenarse eternamente, la sumisión de la mujer al hombre…
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Uds. no fueron creados por Dios con la perversión que tienen sino que eso es producto del desorden que el pecado trajo consigo. Dios no los quiere así sino que los quiere Santos y les da todas las llamadas en la conciencia, en los acontecimientos, en Su Palabra si quieren leer y entender, todas las ayudas en los Sacramentos si verdaderamente tratan de vivir en obediencia a las leyes de Dios y salvarse.
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Si deciden hacerle la guerra a Dios pensando que le van a ganar son unos tontos porque Dios es infinitamente sabio y poderoso, todos sus enemigos van al infierno.
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La Iglesia, con amor y sabiduría y buenas obras y ejemplos, trata de que los pecadores conozcan, amen y sirvan a Dios para ser Santos o al menos no tener pecados mortales y poder llegar al Purgatorio y luego de esa purificación llegar al Cielo, donde para entrar nos cuenta Ntra. Sra. de las Rosas que hay que estar limpio como una estrella.