Del "Pequeño manual de Piedad" (librito para prepararse para la primera comunión, 1949, que sirve para toda la vida.)
LA SANTA CONFESIÓN
Este divino Sacramento es medicina de todas las enfermedades espirituales, fuente de agua viva para lavar las manchas de las culpas, tesoro donde están depositadas las riquezas de Cristo con que se adorna y hermosea el alma, vistiéndose de los merecimientos de nuestro Redentor.
--
ORACIÓN PARA ANTES DEL EXAMEN
Espíritu Santo, fuente de luz, ayudadme a conocer mis pecados. Mostrádmelos tan distintamente como me lo haréis ver cuando comparezca ante el tribunal de la Justicia Suprema. Hacedme conocer el mal que he hecho, y el bien que he dejado de hacer, el número y la gravedad de mis infidelidades en el servicio de Dios, cuántas veces y hasta qué punto he ofendido al prójimo, las faltas, en fin, que he cometido contra las obligaciones de mi estado.
--
Dios de verdad, no permitáis que me ciegue y engañe mi amor propio; quitad el velo con que me venda los ojos, a fin de que nada me impida conocerme cumplidamente. Al mismo tiempo que me dais el conocimiento de mis pecados, inspiradme el horror y el aborrecimiento que se merecen y la resolución de no volverlos a cometer.
--
EXAMEN DE CONCIENCIA
--
Para que puedas recordar bien los pecados que has cometido después de la última confesión, hazte a ti mismo las siguientes preguntas:
¿Cuánto tiempo hace que no me confesé? ¿Me confesé bien? ¿Callé por temor o por vergüenza algún pecado? ¿Qué pecado callé? ¿Cumplí la penitencia que me impuso el confesor? ¿He hecho alguna Comunión sin prepararme debidamente? ¿O sin dar las debidas gracias?
--
Mandamientos de la Ley de Dios
--
1. ¿Recé las oraciones de la mañana y de la noche? ¿Las omití por descuido o por pereza? ¿He leído o hablado algo contra la Iglesia Católica? ¿He leído periódicos o revistas malas, mundanas, irreligiosas? ¿Me he entretenido en alguna superstición?
--
2. ¿He jurado? ¿He dicho maldiciones? ¿He dicho blasfemias o palabras irreverentes contra Dios, o contra los Santos, o contra la Iglesia, o contra los Ministros del Señor? ¿He dado cumplimiento a las promesas hechas a Dios o a los Santos?
--
3. ¿He faltado a Misa por mi culpa, los domingos o días de fiesta? ¿He estado en Misa sin atención, jugando, hablando, distrayendo a los demás? ¿He trabajado sin necesidad en día domingo? ¿He asistido a diversiones peligrosas o prohibidas?
--
4. ¿He respetado, obedecido, cuidado y alimentado a mis padres? ¿He faltado al respeto a mis maestros, a los sacerdotes, a los ancianos? ¿He obedecido a mis superiores con la humildad debida? ¿Cumplo bien con mis obligaciones?
--
5. ¿He hecho daño de palabra o de obra a mí mismo o al prójimo? ¿Tengo odio o rencor a alguien? ¿He dado escándalo o deseado el mal a otros? ¿Me he apartado del bien y de las prácticas religiosas? ¿He reñido, molestado, despreciado, insultado a otros, a pobres, a inferiores? ¿Mi mal genio provoca a otros?
--
6 y 9. ¿He dicho malas palabras? ¿He conversado cosas malas? ¿He tenido compañeros malos? ¿He asistido a espectáculos peligrosos? ¿He leído libros, novelas y otros escritos malos? ¿He hecho o deseado alguna acción deshonesta? ¿Me he deleitado advertidamente en pensamientos malos? ¿Me he complacido en mirar cosas peligrosas? ¿Visto con decencia?
--
7 y 10. ¿He hurtado alguna cosa? ¿He ayudado a hurtar? ¿He pensado o deseado apropiarme de lo ajeno? ¿He murmurado contra Dios porque no me da cuanto quiero?
--
8. ¿He mentido? ¿He calumniado? ¿He descubierto faltas ocultas? ¿He revelado secretos? ¿He leído cartas ajenas? ¿He murmurado o insinuado sospechas de otros? ¿He criticado sin razón faltas de otros?
--
Preceptos de la Iglesia
1ro. ¿He oído Misa entera los domingos y fiestas de guardar?
2do. ¿He ayunado y guardado abstinencia de carne los días de obligación? (nota: JPII estableció que todos los viernes del año son días de abstinencia de carne)
3ro. ¿Me he confesado por lo menos una vez al año, o a tiempo estando enfermo?
4to. ¿He comulgado en tiempo Pascual?
5to. ¿He dado para el culto lo que se acostumbra por los buenos cristianos? --
Oración para después de confesarse
No puedo ofreceros, Dios mío, sino un corazón muy culpable e ingrato; pero al menos haced que os lo ofrezca contrito y humillado. Muchas veces os he prometido corregirme de mis defectos, y, con todo, siempre llevo a los pies de vuestro ministro las mismas acusaciones, los mismos pecados.
Dadme, pues, Dios de bondad, una contrición perfecta que cambie, reforme y quebrante mi corazón; una contrición que me haga desear mil veces la muerte, antes que volver a pecar.
--
Esperarás tu turno recogido y quieto, rezando y sin conversar.
--
MODO DE CONFESARSE
--
YO PECADOR [esta oración ya no se dice hoy en día]
--
Yo pecador me confieso a Dios todopoderoso, a la bienaventurada siempre Virgen María, al bienaventurado San Miguel Arcángel, al bienaventurado San Juan Bautista, a los Santos Apóstoles San Pedro y San Pablo, a todos los Santos y a vos, Padre, que pequé gravemente con el pensamiento, palabra y obra, por mi culpa, por mi culpa, por mi grandísima culpa. Por tanto, ruego a la bienaventurada siempre Virgen María, al bienaventurado San Miguel Arcángel, al bienaventurado San Juan Bautista, a los Santos Apóstoles San Pedro y San Pablo, a todos los Santos y a vos Padre, que roguéis por mí a Dios nuestro Señor. Amén.
--
Enseguida dirás tú mismo: Bendecidme Padre porque he pecado. Hace… (tanto tiempo) que no me he confesado. Cumplí (o no cumplí) la penitencia. No callé ningún pecado (o callé) ni dejé olvidado (o me olvidé) --
Desde entonces he cometido estos pecados... y confiesas los que te acuerdas.
--
…Después oirás con mucha atención la exhortación del confesor; te fijarás bien en lo que te aconseje, así como en la penitencia que te imponga, para después cumplirla. Y mientras el sacerdote te da la absolución, dirás compungido el siguiente:
--
Acto de Contrición
--
O bien: Señor mío Jesucristo, Dios y Hombre verdadero, Creador Padre y Redentor mío; por ser Vos quien Sois, bondad infinita y porque os amo sobre todas las cosas, a mí me pesa, pésame de todo corazón de haberos ofendido; propongo firmemente nunca más pecar, apartarme de todas las ocasiones de ofenderos y cumplir la penitencia que se me ha impuesto; ofrézcoos mi vida, obras y trabajos en satisfacción de todos mis pecados; confío en vuestra bondad y misericordia infinitas me los perdonaréis por los méritos de vuestra preciosa Sangre; y me daréis gracia para enmendarme y perseverar en vuestro santo servicio hasta el fin de mi vida. Amén.
--
DESPUÉS DE LA CONFESIÓN
--
Cumplida la penitencia, reza la siguiente oración:
--
¡Cuán bueno habéis sido conmigo! ¡Oh Señor! En vez de castigarme por tantos pecados como he cometido me los habéis perdonado todos con infinita misericordia en esta santa confesión.
--
De nuevo me pesa de todo corazón, y prometo con vuestra gracia no más ofenderos, antes compensar con redoblado amor las ofensas que os he hecho en toda mi vida.
--
Virgen Santísima, Ángeles y Santos del Cielo, os doy gracias por vuestra asistencia: Dádselas por mí al Señor por tanta misericordia; se han abierto de nuevo para mí las puertas del Cielo, que, pecando, había perdido, y se han cerrado las del infierno, que merecía cuantas veces pequé gravemente.
--
¡Oh María, oh dulce Madre mía! Tened ahora especial cuidado de mí; no permitáis que sea infiel a las promesas que acabo de hacer a mi Dios; con vuestra protección hacedlas firmes e inquebrantables. Así sea.
--
Padre nuestro, Ave María y Gloria.